¡Hola a todos! El otro día en clase el profesor Ricardo nos estuvo explicando en qué consistía la realización de un análisis DAFO ya que en una de las prácticas para la asignatura tendremos que realizar un análisis de este tipo del colegio en el que el año pasado realizamos las prácticas a partir de la ficha del PRACTICUM TICE de la que hablaba en una entrada anterior. (Ver "Reflexión sobre el Practicum TICE"). En nuestro caso particular, vamos a realizar un análisis del uso de las TIC en los centros escolares a nivel de centro, a nivel docente y el alumnado.
¿Qué es un análisis DAFO?
Se trata de una herramienta que se desarrolla con el objetivo de mejorar aquello que se está analizando. Cuando hablamos de educación, suele ser el colegio. Pero, ¿qué analizaríamos? La palabra DAFO es una sigla:
Debilidades internas
Amenazas externas
Fortalezas internas
Obstáculos externos
Los centros escolares lo llevan a cabo para ver qué funciona y no y poder tomar decisiones al respecto. Es un paso previo a la actuación. Para ello, se analizan factores externos que afectan o de los cuales se puede sacar partido y factores internos que se pueden potenciar o corregir.
¿Cómo se lleva a cabo?
En primer lugar se decide qué se quiere conseguir y a partir de ahí, qué se va a analizar.
Recopila los datos para su posterior análisis.
Procede a crear una matriz de DAFO como la anterior. Primer, analiza los factores internos, aquellos que caracterizan al centro y cuya actuación sobre ellos es más fácil.
Sigue analizando los factores externos, que son más difíciles de modificar, pero puedes utilizarlos a tu favor.
Del DAFO al CAME
Una vez realizado el análisis DAFO se puede comenzar a tomar decisiones para conseguir la meta propuesta. Una herramienta complementaria que desempeña esta función y supone un punto de partida para la toma de decisiones o plan de mejora, es el análisis CAME.
Al igual que antes, CAME es una sigla:
Corregir las debilidades
Afrontar las amenazas
Mantener las fortalezas
Explotar las oportunidades
Ambos procesos son muy reflexivos y demandan que los individuos implicados tengan una mente abierta y sean críticos. Asimismo, es muy recomendable llevarlo a cabo en el gran grupo del claustro de profesores en los centros educativos, gestionado por el equipo directivo. Considero que es una herramienta de autoevaluación que se puede llevar a cabo a nivel de centro, pero también en diversas actividades que se hayan llevado a cabo en el aula para ver si se han cumplido los objetivos propuestos o bien para cualquier toma de decisión importante en la vida cotidiana. Es una herramienta útil que mostraré cómo la llevo a cabo en futuras entradas, pero estoy segura que la aplicaré en otros momentos de mi proceso educativo como alumna o como docente.
¡Hasta la próxima entrada!
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