¡Hola a todos! Hoy quiero tratar el tema del bullying, y en pleno siglo XXI, este no se puede tratar sin hablar del cyberbullying. Como futuros maestros, es algo a lo que nos vamos a tener que enfrentar. Por ello, vamos a hablar un poquito más de este tema.
El bullying se define como aquellas conductas que se dan con cierta frecuencia por parte de un alumno o un grupo sobre otro, de manera violenta con la intención de hacer daño; estableciéndose una relación de control-sumisión, en la que aquel que recibe el acoso escolar no puede defenderse.
El cyberbullying es aquel tipo de bullying que se da mediante las tecnologías de la información y la comunicación. El cyberbullying conlleva peligros que el acoso escolar no recoge como el hecho de poder hacer pública la identidad de quien es acosado, permitiendo que gente ajena y desconocida se añada a la agresión. Además, la persona acosada no tiene un momento de "libertad", al contrario que si recibe el acoso solo en el colegio. Cuando el niño se va a casa, sigue siendo acosado.
Un 90% de los niños entre los 10 y 14 años cuentan con un dispositivo móvil. Al no contar en ocasiones con vigilancia por parte de las familias, las nuevas generaciones se crean redes sociales mucho antes de la edad permitida, donde luego tiene lugar el cyberbullying. Por ello, aunque el cyberbullying era algo que solo se daba en la ESO, ahora, nos lo empezamos a encontrar en Educación Primaria. El hecho de que cada vez haya más proyectos educativos que doten al alumnado con dispositivos electrónicos como tablets, permite que los estudiantes puedan crear chats o redes sociales para acosar a compañeros.
Así, el cyberbullying no es un problema exclusivo de los centros escolares, sino que se da entre adultos, en muchos casos hacia personas con cierta repercusión mediática o en redes sociales.
En mi breve experiencia durante las prácticas en el colegio, he sido consciente y he reflexionado que la responsabilidad de detectar los casos acoso escolar reside en los docentes. Entre los estudiantes predomina la idea de que no se debe ser un "chivato". Por ello, ocultan en muchas ocasiones cuando hay conflictos entre ellos. La rápida detección es vital para detener a los acosadores e intentar solucionar el conflicto. Así, los recreos son espacios en el que los estudiantes actúan con más libertad y donde los maestros pueden ver con más claridad las relaciones que establecen los niños y niñas entre ellos, y ver si hay alguien que está solo o al que se está acosando verbal y/o físicamente.
Si bien es cierto que dado el hecho de que los estudiantes cuentan cada vez más con dispositivos digitales, podría darse el caso de que se pensara que se ha parado un caso de bullying y este pasara a ser un caso de cyberbullying exclusivamente, puesto que las redes sociales en ocasiones no tienen vigilancia paternal. En consecuencia, debe primar la comunicación entre los centros escolares y las familias; que los padres y madres sientan que pueden confiar en los tutores y el equipo directivo de sus hijos.
Además, no solo la vigilancia por parte de los docentes y de los padres, sino que se pueden llevar a cabo muchas más medidas de prevención y de actuación contra el bullying y el cyberbullying. Por ejemplo:
Crear un clima positivo en el aula.
Fomentar momentos en el horario escolar de escucha activa entre el tutor y sus alumnos.
Concienciar sobre los peligros que tiene Internet y las redes sociales.
Charlas de concienciación sobre los delitos cibernéticos que se llevan a cabo cuando se hace cyberbullying a alguien.
Charlas sobre la importancia de la solidaridad y la empatía, así como charlas donde se clarifique qué es el acoso escolar y el cyberbullying y los problemas que tienen como consecuencia en aquellas personas que lo sufren.
Fomentar la inclusión y la importancia y valoración de la diversidad en las aulas.
Acabar con la idea del "chivato".
Por ejemplo, en el colegio que he estado haciendo prácticas, se ha trabajado este tema en la asignatura de Valores Sociales y Cívicos. Si bien es cierto que no todos los estudiantes cursan esta asignatura, considero que sería de vital importancia trabajarlo a nivel de centro con todos los estudiantes. Aún así, me ha parecido muy interesante las clases en las que he visto cómo trabajaban los docentes y niños este tema y cómo estaban concienciados.
Fuente: Fotografía tomada del CEIP Tomás Romojaro (Fuensalida, Toledo)
Se debe formar a los futuros maestros para conocer los peligros del bullying y cyberbullying; conocer las medidas para prevenirlo, detectarlo y eliminarlo; concienciando a los alumnos de que debe haber un clima positivo entre todos, donde prime la empatía; no solo en el centro escolar, sino fuera de él, con compañeros del colegio y con el resto de personas que conforman la sociedad.
Un saludo,
Sofía
Referencias bibliográficas:
Enríquez, M.F., y Garzón, F. (2015). El acoso escolar. SABER, CIENCIA Y Libertad, 10(1), 219-233.
Educación 3.0. (17 de diciembre de 2019). ¿Cuál es la edad para comprar su primer móvil? EDUCACIÓN 3.0. https://www.educaciontrespuntocero.com/familias/cual-es-edad-comprar-primer-movil/
UNICEF. (s.f.). Ciberacoso: qué es y cómo detenerlo. UNICEF. https://www.unicef.org/es/end-violence/ciberacoso-que-es-y-como-detenerlo#menu
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